Los prados de siega y diente de la rampa de la Sierra, con cierta humedad edafica, constituyen un denso herbazal tapizado de flores en primavera.
Un pequeño y escondido rincon donde encontraremos, entre otras especies, Armerias, Gladiolos, Filipendulas, Iris y distintos tipos de Orquideas.
Todo un lujo, y un buen momento para flortografiar especies concretas de inusitada belleza.